Reflexión en Zoología Aplicada

Mala la hora en la que, estando yo cómodamente sentada en mi sitio sin que nadie me molestase, me he levantado para sentarme unas cuantas filas más atrás con Chus y sus amigos. He tenido la mala suerte de ir a caer al lado de una chavala que, en mi opinión, debía de ser sorda o un poco lenta, no lo sé. El caso es que la tía descarada, sin conocerme de nada, se ha dedicado toda la clase a copiar mis apuntes y ni siquiera lo ha hecho con el más mínimo disimulo, sino que no tenía ningún reparo en echarse encima mía y meter su cabeza en mi cuaderno. Es una tontería que una desconocida te copie los apuntes pero a mi no se me ocurriría, más que nada porque para eso voy a clase, para tomarlos yo y no para andar molestando a los demás. Y yo pienso: ¿cómo la gente puede ser tan jodidamente caradura? Lo mejor ha sido cuando ha terminado la clase y nos ha dicho: "¿Alguien se ha enterado de algo? Yo he tomado mis apuntes, pero no se de qué ha ido la clase..."